Solar Safe, iniciativa creada por estudiante de la UTPL, consiste en dispensadores inteligentes que podrían implementarse a inicios del 2025 en puntos estratégicos de la urbe. Actualmente, el proyecto está en las fases finales de desarrollo.
La exposición a la radiación ultravioleta (UV) es una problemática creciente debido al incremento de casos de enfermedades cutáneas, como el cáncer de piel, causados por la falta de protección solar. En este contexto, estudiantes de la carrera de Telecomunicaciones de la Universidad Técnica Particular de Loja (UTPL) han creado Solar Safe, un proyecto innovador que busca brindar una solución práctica y económica a este problema, combinando tecnología y responsabilidad social.
En los últimos años, se ha registrado un aumento significativo en los niveles de radiación UV, especialmente en provincias como Loja. Esta situación afecta con mayor intensidad a quienes a menudo no cuentan con medios inmediatos para protegerse. Según estudios dermatológicos, la falta de uso de bloqueador solar es una de las principales razones del incremento en las enfermedades relacionadas con la piel.
Ante esta realidad, nace el proyecto Solar Safe como una propuesta disruptiva que busca facilitar el acceso al protector solar mediante dispensadores automáticos ubicados en puntos estratégicos de la ciudad.
Innovación tecnológica aplicada al cuidado de la salud
El proyecto, del que forman parte Gonzalo Álvarez y Darío Cuenca, estudiantes de noveno ciclo de la carrera de Telecomunicaciones de la UTPL, comenzó como una práctica académica en su quinto ciclo de estudios. Sin embargo, gracias al apoyo de docentes como Esteban Briceño y al respaldo de la universidad, la iniciativa evolucionó hasta convertirse en un modelo de solución real para la comunidad.
Gonzalo Álvarez comenta que Solar Safe consiste en dispensadores inteligentes que funcionan con redes de comunicación para monitorear el estado del producto, garantizando su disponibilidad constante. Cada dispensador ofrece protector solar en cantidades apropiadas, haciéndolo accesible tanto desde el punto de vista económico como práctico.
Actualmente, esta iniciativa se encuentra en su fase final de prototipado, tras superar etapas iniciales de diseño y validación en escenarios reales. Durante eventos como ferias y casas abiertas, el proyecto ha recibido una respuesta positiva por parte de la ciudadanía, quienes han destacado su utilidad e innovación.
Los estudiantes han identificado parques, centros deportivos y espacios públicos como lugares clave para la instalación de los dispensadores. Estos puntos fueron seleccionados en base a estudios de comportamiento social y a la necesidad de garantizar el acceso al protector solar en áreas donde su adquisición puede ser limitada, proporcionando 5 mililitros de producto por cada uso del dispositivo.
Para implementar el proyecto a mayor escala, los estudiantes están buscando alianzas estratégicas con instituciones públicas y privadas, entre ellas el Municipio de Loja. Este apoyo sería fundamental para financiar la producción de dispensadores y garantizar que el precio del protector solar sea lo más accesible posible para la ciudadanía.
Prevención del uso indebido y sostenibilidad económica
Darío Cuenca señala que uno de los retos del proyecto es evitar el empleo excesivo o el mal manejo de los dispensadores. Para abordar esta problemática, el equipo planea implementar un sistema de cobro económico mínimo por sachet, lo que permitiría un acceso regulado y, al mismo tiempo, cubriría parte de los costos operativos.
Según el estudiante, este modelo no solo ayuda a mantener la sostenibilidad económica del proyecto, sino que también promueve un uso responsable por parte de los usuarios.
Conexión con la vinculación social y los ODS
La iniciativa de Solar Safe es un ejemplo claro del compromiso de la UTPL con la vinculación social y el cumplimiento de los ODS. Al enfocarse en el cuidado de la salud y el acceso equitativo a recursos esenciales como el protector solar, el proyecto contribuye directamente al bienestar de la comunidad.
Esteban Briceño, catedrático de la UTPL, destaca que desde la carrera de Telecomunicaciones se fomenta constantemente la participación de los estudiantes en proyectos que identifiquen y respondan a problemáticas sociales. Esto se logra mediante una formación integral que combina conocimientos técnicos con el desarrollo de habilidades en emprendimiento y responsabilidad social.
Aunque el núcleo del equipo está compuesto por ocho estudiantes de Telecomunicaciones, el proyecto también ha contado con el aporte de estudiantes de otras áreas, como Ingeniería Civil e Ingeniería en Computación. Este enfoque interdisciplinario ha permitido integrar diferentes perspectivas para optimizar tanto el diseño técnico como la funcionalidad del producto.
Proyección y expectativas para 2025
El equipo de Solar Safe tiene como meta implementar los primeros dispensadores en Loja a inicios de 2025. A partir de esta etapa, planean realizar mejoras continuas basadas en el feedback de los usuarios, además de explorar la expansión del proyecto a otras ciudades del país.
Con el respaldo de iniciativas como la Incubadora Prendho de la UTPL y el Parque Científico y Tecnológico de esta misma institución, el proyecto tiene el potencial de convertirse en un modelo replicable a nivel nacional e incluso internacional, posicionando a la UTPL como un referente en innovación tecnológica y social.