En un acto solemne, la comunidad educativa recordó el Milagro de la Virgen Dolorosa, el Día de la Tierra y el Día Nacional de la Cultura Tributaria, con la participación de autoridades y delegaciones institucionales.
Con un ambiente de respeto y compromiso, la mañana del martes 29 de abril se llevó a cabo un acto cívico organizado por la Unidad Educativa Fiscomisional La Dolorosa, en el que se conmemoraron tres fechas significativas: el Milagro de la Virgen Dolorosa, el Día de la Tierra y el Día Nacional de la Cultura Tributaria.
El evento contó con la participación de delegaciones de escuelas municipales, miembros del Cuerpo de Bomberos de Loja, Agentes Civiles de Tránsito, Agentes de Control Municipal, representantes del Servicio de Rentas Internas (SRI) y servidores municipales.
Durante su intervención, Néstor Alcívar, rector de la unidad educativa, destacó la historia de la institución, la cual nació por iniciativa del entonces obispo de la Diócesis de Loja, Monseñor Nicanor Roberto Aguirre. Resaltó también la evolución de la institución hasta consolidarse en 2015 como Unidad Educativa Fiscomisional La Dolorosa, que hoy ofrece formación desde educación inicial hasta el bachillerato.
Días conmemorativos
Una estudiante de la institución recordó que el Día de la Tierra es una oportunidad para reflexionar sobre el cuidado del planeta desde nuestras aulas, hogares y comunidades, mientras que el Día Nacional de la Cultura Tributaria invita a valorar el impacto de los tributos en el desarrollo de servicios públicos fundamentales.
Franco Quezada, alcalde del cantón Loja, se dirigió a los asistentes agradeciendo la invitación y subrayando que “hablar de cultura tributaria es hablar de principios, valores y conciencia social”. Enfatizó que el cumplimiento tributario es una muestra de compromiso con el país y un acto de amor a la patria. “Cada contribución es una semilla que sembramos juntos para construir un Ecuador más justo y equitativo”, afirmó.
El acto cerró con un llamado a continuar promoviendo la conciencia ecológica y la responsabilidad ciudadana desde todos los espacios: la familia, la escuela y la comunidad.