Esta es la cúspide de un proyecto que arrancó hace cinco años y que ve sus primeros frutos en un joven que representa una historia de superación pasando de ser trabajador a experto.
Con una infancia rodeada de cultivos y postes eléctricos en el norte de la ciudad de Loja, Juan Carlos Cabrera forjó un sueño: convertirse en ingeniero eléctrico. Hoy, ese sueño se ha hecho realidad pues él se convirtió en el primer graduado de la Carrera de Ingeniería en Electricidad de la Universidad Nacional de Loja (UNL), una carrera única en el sur del país.
Juan Carlos es hijo de una familia agricultora y ganadera. Su padre trabajó en la construcción de redes eléctricas -como liniero (ayudante)-; su hermano también siguió ese camino y a ellos debe su amor por la electricidad. “Fue emocionante acompañarlos, ver cómo daban energía a las comunidades, cómo trabajaban en altura, desde ahí nació esta pasión”, anotó.
Cuando terminó el bachillerato, su anhelo era claro, pero no realizable: estudiar ingeniería eléctrica. Para entonces, la carrera no existía en Loja y su familia no podía costear sus estudios en universidades privadas de otras ciudades. Como alternativa, comenzó a estudiar Electromecánica, pero cambió cuando la UNL abrió hace cinco años la carrera de sus sueños. Ahora su logro marca un hito para él, su familia y para la Alma Máter lojana.
“Estudiar aquí fue una bendición. Me permitió formarme con calidad, cerca de mi familia y con docentes comprometidos. Gracias a la carrera, hoy me siento listo para servir a la región, al país y devolver todo lo que he recibido”, expresó Juan Carlos durante el acto de incorporación en el que pasó de ser linero a ser el primer profesional de la UNL de su rama.
Para Francisco Aleaga, director de la Carrera de Ingeniería en Electricidad, la UNL se ha convertido en un centro de oportunidades para la juventud. “Juan Carlos es nuestro primer graduado y va a aportar con sus conocimientos -ya como ingeniero- en la gran diversidad de proyectos de generación eléctrica tradicional y alternativa que tenemos en el sur”, indicó.
Mientras que Julio Romero, decano de la Facultad de la Energía, las Industrias y los Recursos Naturales No Renovables, reconoció este resultado del proceso de transformación académica que atraviesa la universidad pública de Loja. “El rol de la academia es formar profesionales comprometidos, humanistas y con sentido de innovación social”, manifestó.
Al cumplirse cinco años de creación de la Carrera de Ingeniería en Electricidad, la UNL ratifica que no sólo entrega a la sociedad nuevos profesionales, sino que también mantiene vigente su compromiso de transformar vidas a través de la educación superior pública, territorial e inclusiva.
TOME NOTA
Ingeniería en Electricidad UNL
- 188 estudiantes.
- 17 mujeres estudian Electricidad.
- 9 ciclos de formación.