Sectores de Loja siguen sin agua potable. UMAPAL asegura que el sistema ya comienza a operar con caudales controlados, mientras que la ciudadanía afectada espera soluciones oportunas.
La desesperación de la ciudadanía por la falta de agua potable llega a su límite. Barrios enteros de Loja enfrentan una dura crisis por la escasez del líquido vital. Sin embargo, la Unidad Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Loja (UMAPAL) asegura que se están cumpliendo todos los procedimientos técnicos para restablecer el servicio de forma segura y permanente.
“¡La gente no aguanta ya sin agua!”, es el sentir generalizado de los lojanos, y el director de la UMAPAL, Ángel Rentería, no es ajeno a la urgencia. A través de declaraciones, explicó que se han realizado avances en la conducción de Shucos, donde el sábado pasado se efectuó la fundición del anclaje, una pieza clave para soportar las presiones internas de la tubería de acero de 800 milímetros.
“El hormigón necesita 28 días para alcanzar su resistencia total, pero hemos utilizado aditivos que permiten reducir ese tiempo a tres días”, indicó Rentería, justificando la espera técnica como necesaria para evitar futuros colapsos.
El sistema de abastecimiento ya comenzó a llenarse con caudales controlados y, según el informe técnico, la planta Carigán ya está recibiendo un 45% del caudal requerido. De acuerdo con el director, desde la madrugada del martes se ha iniciado la distribución a algunos sectores, y se espera que pronto el sistema esté al 100% operativo.
La situación se complica aún más debido a las constantes lluvias en la zona, lo que mantiene los suelos saturados y obliga a la Unidad Municipal de Agua Potable y Alcantarillado a extremar precauciones en los trabajos. “Debemos garantizar que no haya más fallas, por eso seguimos estrictos protocolos de seguridad”, concluyó Rentería.
Malestar ciudadano
Juan Hurtado, ciudadano de Loja, expresó su malestar ante los constantes cortes de agua que afectan a la ciudad. Señaló que, pese a que las autoridades aseguran estar trabajando en reparaciones, el problema persiste. “Esperamos que de una vez por todas se solucione esta situación. Los cortes siguen y eso genera molestias e impide que podamos desarrollar con normalidad nuestras actividades diarias”, manifestó.
A este reclamo se sumó María Astudillo, quien coincidió en que la situación ya resulta insostenible. “Desde hace semanas las autoridades dicen que los trabajos están por concluir, pero en mi casa los cortes continúan. Es necesario que nos digan la verdad”, señaló.